Autor: Fabián Labarca Mercado
Fecha de publicación: 2024-11-10
Hacer un CV es un reto. Cuando asesoro a personas, este es el primer punto que reviso. En el 90% de los casos, encuentro errores que disminuyen las probabilidades de que alguien pase a la siguiente etapa de evaluación.
No suelen ser errores graves, pero sí afectan la forma en que los reclutadores leen el CV. Esto, a su vez, reduce la cantidad de entrevistas que una persona recibe.
Lamentablemente, no hay suficiente información en español que explique cómo hacer un buen CV. Las personas aprenden más por prueba y error que por contar con la guía de alguien con experiencia. Aún peor, los candidatos rara vez reciben retroalimentación sobre por qué fueron descartados, lo que genera más angustia y dudas sobre la calidad del CV que están enviando.
Nuestra intención con este texto es ofrecer la guía más completa sobre cómo hacer un CV en español. Si tienes alguna duda, por favor, escríbenos en LinkedIn y trataremos de responderla lo antes posible. Además, agregaremos tu consulta a este post para que más personas puedan beneficiarse de ella.
Cuando un reclutador lee tu CV, su objetivo principal es entender si tienes la experiencia relevante para el cargo al que postulas. En algunos casos, esto significa buscar a alguien que haya realizado tareas similares a las que se requieren en la oferta. En otros casos, se buscan habilidades transferibles que puedan aplicarse al nuevo puesto.
Lo esencial es que tu CV genere confianza en que puedes cumplir con lo que el cargo necesita. Esta confianza se construye al demostrar claramente tus experiencias previas, logros, y habilidades relevantes.
Si no estás llegando a la etapa de entrevistas, es probable que las empresas consideren que no tienes la experiencia necesaria para los cargos a los que postulas. El desafío aquí es convencer a la reclutadora de que sí la tienes, y para ello, es fundamental destacar la experiencia más relevante para el puesto específico.
Cuando reviso un CV, suelo encontrar dos tipos de problemas: problemas de fondo y problemas de forma. Los problemas de forma están relacionados con cómo está redactado, ordenado y presentado el documento. Estos errores son relativamente fáciles de corregir y son en los que la mayoría de los servicios de redacción de CV se enfocan. Por ejemplo, errores de ortografía, desorden visual o un uso inadecuado de secciones pueden hacer que el CV sea menos atractivo y más difícil de leer.
Los problemas de fondo, en cambio, son más profundos y suelen tener que ver con decisiones tomadas durante la carrera profesional que pueden afectar la percepción del candidato. Un ejemplo común de esto son los cambios frecuentes de trabajo. Las empresas suelen buscar estabilidad, y un historial con muchos cambios en poco tiempo puede generar desconfianza. Otro ejemplo es la falta de experiencia relevante para el cargo al que se postula, lo cual no siempre se puede resolver simplemente mejorando la redacción del CV.
Mientras que los problemas de forma se pueden corregir con una buena edición, los problemas de fondo requieren una reflexión más profunda sobre la trayectoria profesional. En algunos casos, puede ser necesario adquirir nuevas habilidades o replantearse la dirección de la carrera para aumentar las posibilidades de ser seleccionado.
Quiero que tengas en cuenta que puedes hacer el CV perfecto y aún así ser descartado. En ese caso, la solución es diferente y no es lo que abordaremos en este post, pero lo haremos más adelante.
Desde que reviso CVs, creo que nunca me he encontrado alguno que no cometa al menos 1 de estos errores. Varios tienen su origen en antiguas creencias sobre qué es relevante para contratar a una persona. Si has cometido alguno de estos, está bien. Mi intención es ayudarte a resolverlo.
Ortografía: a nadie lo contratan por su buena ortografía, pero todos pueden ser descartados por la ausencia de esta. Se considera un requisito mínimo. Cuando los reclutadores leen un CV con errores de este tipo, asumen que es por falta de preocupación. Hoy en día existen muchas herramientas, puedes usar el corrector de word, el de Google Docs o LanguageTool como extension de Chrome. O si prefieres, puedes preguntarle a un familiar que te lo revise o usar ChatGPT.
Desorden visual: este es de los más difíciles de solucionar para ser honestos. Las personas no le toman el peso muchas veces, pero algo que se ve desordenado es más difícil de leer. Lo complicado de este error es que es difícil de ver si no tienes experiencia en diseño. Por eso, al final de esta página te dejamos una plantilla que puedes usar para resolver este problema.
Datos personales: datos como tu dirección, tu número de identidad, estado civil y edad son datos personales que no deben estar en tu CV. Lo único relevante son tus datos de contacto y experiencia. Lo demás debes guardártelo. En el mejor escenario, no tendría relevancia, pero en un mal escenario, abre la posibilidad de que seas discriminado por alguna de estas variables.
Falta de profesionalismo en el correo: todos tenemos un email que nos hicimos a los 12 años y que probablemente deberíamos enterrar en una fosa para que nunca vuelva a ver la luz del sol. No uses ese email para tu CV. Usa uno que sea construido a partir de tu nombre y apellido, idealmente sin números.
Largo del CV: este es un error menos común hoy en día. Se ha naturalizado que el CV tiene máximo 2 páginas. Pero cada cierto tiempo aparece un caso extraño que tiene un largo de 4 o 5. La regla fácil es, máximo 2, idealmente 1.
La mayoría de las ofertas laborales recibe más de 100 postulaciones y he llegado a ver 6.000 personalmente. Los reclutadores no tienen tiempo de revisar un CV muy extenso ni aquellos que se complican con secciones innecesarias. Por ello, hay 4 secciones que siempre deben estar presentes:
Aquí va tu nombre, tu email, teléfono y LinkedIn. Va primero porque si quieren contactarte, debe ser la información más fácil de encontrar.
Tu número debe estar completo. Considera que la reclutadora puede estar en otro país y te va a escribir por WhatsApp. Por lo que te recomiendo poner el formato internacional.
Como dijimos antes, por favor, pon un correo profesional. Este es de los errores más frecuentes. Ponte en el lugar de una reclutadora que está buscando un subgerente/subdirector de marketing y lo primero que ve es tu correo de la secundaria “[email protected]”. Lo mejor es un formato que incluya tu nombre y o apellidos usando tus iniciales.
También debe estar tu LinkedIn conectado de tal manera que el profesional de selección pueda hacer click y revisarlo. No profundizaremos en tu perfil de LinkedIn esta ocasión, pero preocúpate de que esté ordenado y que sea consistente con tu CV. De lo contrario va a ser una señal de alerta para la reclutadora.
Si tienes un portafolio o repositorio en GitHub, también debe ir en esta sección vinculado de la misma forma que tu LinkedIn.
Aquí van tus estudios relevantes para la contratación. Debes poner tus estudios de pregrado, postgrado y diplomados que hayas realizados. Tienen que ir en orden descendente, desde el más reciente al más viejo.
No te recomendamos poner tus certificaciones por cursos o capacitaciones en esta sección. Estas se deben poner al final.
No es necesario poner tu nota de titulación. En general las empresas no se fijan en ese tipo de cosas. Es posible que una empresa consulte tu nota de manera explícita, pero no es lo usual.
Si realizaste un intercambio este es el momento de ponerlo. Especialmente si es relevante para la posición que estás participando. Por ejemplo, me tocó asistir a una ingeniera que trabajaba en marketing dentro de la industria del retail y había hecho un intercambio en Italia específicamente enfocado en moda. En ese caso suma mucho. También agrega valor si la universidad es reconocida internacionalmente.
Al igual que la sección de estudios esta debe estar ordenada de manera descendente.
Lo importante es que muestres resultados. La mayoría de las personas escriben sus CVs de manera que enumeran las tareas que ejecutaron en cada uno de sus trabajo. Sin embargo, lo que busca una reclutadora son los KPIs que mejoraron con tu gestión y las herramientas que ocupaste para lograrlo. Así se forma una idea de tus capacidades y si eres compatible con el cargo.
Esta sección debería estar redactada para mostrar las habilidades que más solicitan las empresas para el cargo que estás buscando. Sin embargo, es difícil que las personas hagan esto por su cuenta. Parte de lo que hacemos en Ejecutivo Latino es investigar las habilidades más solicitadas por cada tipo de cargo. Te recomendamos dar una vuelta para que revises si está tu cargo y así tengas una mejor noción de lo que deberías resaltar.
La importancia de esta sección varía según el cargo al que estés postulando, sin embargo siempre, se espera que esté presente. Aquí deben estar las habilidades técnicas que son fundamentales para el cargo y que te permiten diferenciarte de los demás candidatos. Pon todo el software, normas o máquinas que sean indispensables para hacer tu trabajo. Especialmente aquellas que son altamente demandadas y que pocas personas dominan.
Omite aquellas habilidades técnicas que se consideran básicas para tu cargo. Muchas personas cometen el error de mencionar su proficiencia en Excel o Inglés, cuando en su carrera o área de trabajo se considera una habilidad básica.
Existen más secciones dentro de un CV que las personas agregan. Sin embargo, estas no son fundamentales y se pueden omitir.
Estas son:
Esta es una sección que está tan estandarizada que la mayoría la considera obligatoria. Pero la verdad es que puede omitirse. Especialmente si no te sientes cómodo con ella.
La forma errónea de hacer esta sección es redactar una serie de habilidades blandas y tus objetivos profesionales. Un ejemplo de este error sería: Profesional orientado al logro que trabaja en equipo para lograr metas desafiantes en entornos competitivos de innovación. Ganas de aprender sobre la industria financiera.
Esta sección es para poner tu experiencia nivel estratégico. Es decir, todo aquello que te ha tomado más de 2 años construir y hacer. Aquí te dejo un buen ejemplo:
Growth Engineer con 5 años de experiencia en startups con operación en todo América Latina. Escalé negocios desde el prototipo a más de un 1.000.000 de usuarios en menos de 3 años. He dirigido equipos de operaciones y ventas con base en Chile, Perú, Colombia y México. Experiencia escalando productos en la industria HR-Tech, E-commerce y Fintech en segmentos B2B y B2C.
Piensa en tus logros más grandes en toda tu carrera profesional que puedan ser relevantes para los cargos que estás postulando. No sólo en lo que hiciste el último año. De esa forma es más probable que llegues a una sección introductoria mucho mejor. Si no puedes, no pasa nada, esta sección se puede omitir.
La educación es diferente hoy que hace 20 años. Antes la gente se titulaba a los 23, no volvía a tomar un libro en su vida y tenía su carrera asegurada (estoy exagerando). Pero hoy, lo más común es que los profesionales continúen sacando certificaciones a lo largo de su carrera. Especialmente en trabajos que tienen funciones altamente técnicas.
Por ejemplo, es muy frecuente que los Data Engineer estén renovando sus certificaciones relacionadas con los software que usan. O por ejemplo, que personas de marketing, saquen un certificado en desarrollo front-end porque tienen que levantar sitios de manera frecuente.
Por eso, ahora los CVs suelen tener una sección al final con todas las certificaciones que has sacado. Va al final porque puede saturar el CV de certificaciones, ya que algunas personas obtienen varias al año. Si tienen verificación digital, te recomiendo poner el nombre y vincules el certificado a su URL.
Esta sección debería ir sólo si eres un recién titulado. Se agrega porque es difícil evaluar a una persona que tiene experiencia sólo en prácticas laborales.
Lo que no debes poner aquí es “ir de fiestas”. Te sorprendería la cantidad de CVs que dicen esto.
Si quieres resaltar, aquí hay un par de opciones:
Si en alguno de estos tuviste responsabilidades de liderazgo, mejor todavía.
Esta sección debería desaparecer si ya tienes 1 o más años de experiencia. En ese escenario te quita espacio valioso en el cual deberían resaltar tus logros y habilidades en vez de aquello que haces en tu tiempo libre.
Comencemos con el eterno debate. Primera o tercera persona. La verdad depende mucho de dónde estés postulando. Conozco empresas que no descartarían un candidato por escoger una sobre otra, pero también sé de organizaciones que son rígidas con la redacción. Por algún motivo, algunas personas piensan que tercera persona es más formal, a pesar de que mucha gente no está de acuerdo. También debes considerar que pueden existir diferencias culturales dependiendo el país. Yo te sugiero que escojas uno con el que te sientas cómodo y que seas consistente en todo el CV. Como sea, vas a dejar contento a algunos y a otros no.
Otro gran problema de redacción en los CVs es el exceso de utilización de adjetivos y adverbios. La mayoría de las personas no saben utilizarlos para que faciliten el entendimiento de la frase. La culpa de esto la tiene la educación que te premia por cantidad de hojas escritas y no por su calidad narrativa.
Por ejemplo, revisemos esta frase.
Original: Utilizar análisis de datos históricos de ventas para tomar decisiones de compra informadas para el departamento de ropa de niñas.
Corregida: Analicé datos de ventas para evaluar las compras en el departamento de ropa de niñas en la temporada otoño 2022.
Mejor: Analicé datos de ventas para evaluar las compras en el departamento de ropa de niñas en la temporada otoño 2022. Con las estimaciones reduje el costo de compra en un 10% con respecto al año anterior.
Piensa que todo cargo en el que has trabajado está siendo medido por alguna métrica de éxito. Conocerla y entenderla suma mucho valor para un potencial empleador porque demuestra que puedes mantener el foco en un objetivo. Te hace más independiente y maduro profesionalmente. Sin embargo, en toda mi vida en el mundo de reclutamiento y selección, he leído decenas de miles de CVs. Pero a lo mucho, 20 personas me han entregado un CV con resultados. Poner resultados te diferencia mucho.
Si no sabes cómo hacerlo, te sugiero esta estructura:
Quizás no vas a poder resolver todas las preguntas en un sólo punto de experiencia. La estructura no es tan rígida y es sólo para que te hagas una idea.
Aquí me voy a meter en una polémica. ¿Vale la pena pagar por servicios relacionados al CV? Mi opinión personal es que no. La redacción en sí misma del CV no es un valor agregado tan grande como para contratar a un profesional. Sí creo que vale la pena contratar un profesional si no entiendes por qué estás siendo rechazado y el servicio incluye la elaboración completa de una estrategia de búsqueda de empleo. Para hacer el CV te dejamos esta guía que debería ser suficiente.
También te vas a encontrar sitios que venden plantillas de CV. Tampoco lo valen. Algunas se venden como más “profesionales” en su diseño, agregando una serie de elementos visuales que sólo entorpecen la lectura. En un CV lo mejor es mantener las cosas simples. Otros sitios te venden que sus plantillas están optimizadas para las lecturas de Inteligencia Artificial. Eso sencillamente no es posible, y abordaremos ese punto en la siguiente sección.
La respuesta simple, no se puede.
Hay muchas empresas que están prestando el servicio de procesamiento de CVs a empresas. En América Latina existen Aira, Worcket, Evaluar.com y Gupy como las más conocidas. Nadie fuera de esas empresas sabe exactamente cómo funciona la tecnología particular que están ocupando para hacer el procesamiento. En consecuencia, probablemente si optimizas para un caso, el otro empieza a fallar y nadie puede saberlo.
Mantén tu CV simple. Sabemos por el estado del arte, al momento de escribir este artículo, que la mayoría de los modelos no pueden procesar imágenes. Por ende un CV con íconos y elementos gráficos, no va a ser correctamente entendido por una inteligencia artificial. Tu CV debe ser mayormente texto y contener todo lo importante en texto en una estructura lineal de contenido. Por ello lo mejor es usar Word, y no usar herramientas gráficas como Canva o la Adobe Suite.
Tampoco intentes hacer una “prompt inyection”. En el último tiempo vi que se empezó a hacer popular la idea de esconder una prompt que le dijera a la inteligencia artificial que eres un candidato apto para el cargo. Por el mismo motivo de antes, no sabemos si lo que usa la empresa es un LLM como ChatGPT. La inyección que hiciste podría quedar al descubierto o podría alterar la interpretación positiva que tenía de tu CV. En consecuencia, no vale la pena el riesgo.
Hoy la mejor forma de pasar una lectura automatizada de CV es sencillamente hacer un buen CV.
Hay personas que te dicen que necesitas hacer un CV por cada postulación. La verdad, yo creo que no saben lo que están diciendo. Un candidato puede postular a cientos de ofertas a la semana, editarlo toma más tiempo que postular y usualmente adaptarlo no va a mejorar sus chances de ser contratado. Lo que sí aumenta tus posibilidades, es poner explícitamente las habilidades que sabes que son más solicitadas dentro del puesto al que estás postulando.
Sin embargo, esto es difícil si no tienes la información. Justamente lo que queremos resolver en Ejecutivo Latino. Te recomendamos darte una vuelta por nuestra base de sueldos según cargo, la cual cuenta en detalle qué están buscando las empresas por cada especialización profesional.
Esta parte es más delicada. Esta situación suele ser un problema para varios candidatos que, por motivos personales o fortuitos, tienen un periodo en el cual no estuvieron trabajando. Sé que tener un periodo sin empleo puede generar ansiedad, pero es muy común que las personas se demoren meses en encontrar trabajo. Esta sección está especialmente pensada para personas que tienen estudios profesionales. Probablemente algunas de mis recomendaciones no van a ser válidas para todos los contextos.
El principio que siempre recomiendo es ser honesto. Si un familiar tuyo requirió cuidado o si sencillamente decidiste que necesitabas 1 año para ordenar tus ideas, es totalmente válido. Lo peor que puedes hacer es mentir y que te descubran.
Dicho eso, los gaps laborales en muchos casos se pueden evitar. Lo importante es demostrar que estuviste haciendo algo relevante para el cargo al que estás postulando y a veces se pueden solventar con otras actividades. Por ejemplo voluntariados o servicios profesionales.
Normalmente cuando alguien queda cesante y ya realizó todos los trámites de burocráticos relacionados a mantener su seguro y salud, yo le recomiendo comenzar a ofrecer sus servicios. Una opción son los voluntariados. Las ONGs siempre requieren personas que las ayuden a hacer mejor sus procesos y suelen tener mucha voluntad, sólo les falta la técnica. Ahí puedes llegar tú con tus servicios y de esa forma te anticipas al gap laboral. Además, puedes conseguir una nueva referencia positiva.
Por otro lado, puedes fundar tu propia empresa. Ya sea solo o con otros colegas que puedan haber perdido el trabajo. Esta no tiene que ser el próximo emprendimiento estrella de Silicon Valley. Es suficiente con que les permita mantener un ingreso mientras pasa lo peor. En ocasiones, las referencias de clientes también les pueden servir para conseguir un nuevo trabajo. En otras, el mismo cliente los puede terminar contratando como integrantes de su equipo.
Por último, si no tienes ninguna chance de mantenerte activo laboralmente. Puedes intentar con cursos que te desarrollen habilidades que estén siendo solicitadas en los cargos que estás postulando. Para esto te recomendamos que tomes el curso que te permita desarrollar la habilidad que menos personas tengan, pero que sea más solicitada en el mercado. De esa forma mejoras tus chances de ser escogido cuando puedas buscar empleo.
Quizás, esto va a ser un poco extraño. Hoy, un CV no debería tener ningún elemento gráfico, a menos que seas diseñador y se te evalúe por eso.
Hubo una tendencia en que muchos CVs empezaron a incluir íconos, gráficos vectoriales y diseños de varias columnas. El problema de todas estos componentes es que pueden interferir con la lectura de un Aplicant Tracking System (ATS). Estos son programas que usan los reclutadores para dar una primera lectura a tu CV. La mayoría de las veces no va a ser un ser humano el que lea tu Curriculum. Por eso, el CV debe ser sólo texto y hecho en un documento en Word idealmente.
Lo mismo sucede con las fotos, sin embargo el problema aquí es más grande aún. Las fotos pueden generar discriminación por parte de un reclutador. Incluso de manera inconsciente. Las personas no pueden controlar sus sesgos cognitivos, por lo que tambien te recomiendo que omitas una foto de perfil en tu CV.
Anteriormente vivíamos en un mundo donde los datos no eran un problema. En esa época, era común que las referencias laborales fueran directamente en el CV. Hoy las personas conocen el peligro de que sus datos personales estén publicados de manera masiva.
Con este riesgo en mente, las referencias dejaron de estar presentes en el CV. Tampoco es realmente útil en esta etapa del proceso de selección. Piensa que hay muchas etapas hasta que llega a la oferta laboral. La lectura de CVs es la primera y en la que participan cientos de postulantes normalmente. Por lo que un reclutador no va a considerar llamar a tus 2 o 3 referencias hasta que ya estés mucho más avanzado en el proceso de selección.
Debido a estos 2 motivos, las referencias ya no se escriben en tu CV. Tampoco se pone “referencias a solicitud” o algo por el estilo. Esta es una sección que sencillamente ya no existe.
Todo lo que te comenté en este post se hace más sencillo usando la plantilla que te dejo a continuación:
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